La importancia de perdonar

La importancia de perdonar

Autoayuda. Es muy importante poder perdonar, porque si no, nos llenamos de bronca. Tragamos, guardamos y explotamos como un sapo.

Es muy importante poder perdonar, porque si no, nos llenamos de bronca. Tragamos, guardamos y explotamos como un sapo.

El perdón se ha confundido a lo largo de mucho tiempo porque se ve como signo de debilidad, como que el que perdona es medio tonto, y lo que tenemos que definir en primer lugar es lo que no es el perdón.

No es olvidar: primera cosa que debemos dejar clara porque cuando uno persona no tiene amnesia, el recuerdo siempre va a estar, no hay amnesia del recuerdo, el punto está en qué nos despierta el recuerdo.

No es minimizar: cuando uno siente bronca no tiene que minimizar, hay gente que perdona automáticamente y no siente el enojo, pero es muy importante conectarse con esto porque si no uno termina explotando.

No es reconciliación: por ejemplo, si a mí me pegan y yo perdono, ¿quiere decir que voy a dejar que otra vez me peguen? Obviamente no, es decir que no necesariamente hay reconciliación en el vínculo.

No es justificar: el perdón es un acto que hacemos por nosotros y no es un acto de debilidad, es un acto de fortaleza, el perdón es cancelar una deuda emocional.

El perdón es renunciar al derecho de venganza, porque cuando nos lastiman tenemos derecho del “ojo por ojo”, pero ese ojo por ojo nos deja a todos ciegos.

Entonces perdonar es desatarnos, es liberarnos, es desalojar.

Imaginemos que vamos caminando y se mete alguien en nuestra casa y se instala ahí, ¿qué vamos a hacer?, tenemos que sacar a esa persona por los medios que sea. ¿Qué pasa cuando alguien nos lastima y alquila nuestra mente?: se instala en nuestra mente, comienza a controlarnos.

Entonces ahora tenemos dos problemas, el primer problema es que nos lastimó y el segundo es la bronca o el odio que tenemos que hace que permanezca esa persona ocupando un espacio mental y desde ahí enfermarnos.

Harvard realizó algunas investigaciones interesantes sobre los beneficios del perdón:

-Reduce el estrés.
-Mejora la salud cardiovascular.
-Reduce el dolor de espalda y las coyunturas.
-Es decir que cuando una persona perdona se beneficia a sí misma.

Ahora, perdonar no es minimizar, no es olvidar, no es reconciliación, no es decir: “Bueno, yo te perdono y que Dios se encargue”, porque necesitamos recurrir a la justicia humana además de la justicia divina.

Una metáfora que me gusta es imaginar un avión que está sobrevolando y no aterriza nunca, en algún momento va a aterrizar y va a hacerlo sin combustible, es decir que perdonar es hacer aterrizar el avión.

Liberarnos o desatarnos de esas personas que nos han lastimado es un acto terapéutico. No es fácil perdonar. A veces el perdón se da de golpe y a veces de a poquito. Sólo los príncipes perdonan.